“A medida que nos vamos haciendo grandes
el corazón muere”,
decía una película adolescente,
y será que el corazón muere, o vamos comprendiendo
que el cuerpo le queda chico al corazón,
que el corazón es una amenaza,
la vieja advertencia del madero y el bajel
ese río de adentro, ebrio de espectros
máquina de ausencias, el íntimo teatro de un cielo que
quiere ser mar de hombres, o ayuno de etcéteras,
en fin, entre la vida y la muerte, el murmullo del corazón,
tamborcito de luz y sombras, harina de especie
primer ritmo de la sutil aurora
último movimiento del poniente en el hombre,
es el corazón, todos los corazones que golpearon
las puertas del mundo en el día,
es la ironía que llevamos dentro,
el manual para empezar a ser hermosos fantasmas
el corazón muere”,
decía una película adolescente,
y será que el corazón muere, o vamos comprendiendo
que el cuerpo le queda chico al corazón,
que el corazón es una amenaza,
la vieja advertencia del madero y el bajel
ese río de adentro, ebrio de espectros
máquina de ausencias, el íntimo teatro de un cielo que
quiere ser mar de hombres, o ayuno de etcéteras,
en fin, entre la vida y la muerte, el murmullo del corazón,
tamborcito de luz y sombras, harina de especie
primer ritmo de la sutil aurora
último movimiento del poniente en el hombre,
es el corazón, todos los corazones que golpearon
las puertas del mundo en el día,
es la ironía que llevamos dentro,
el manual para empezar a ser hermosos fantasmas
Pedro Patzer 2009
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