9/28/2009

domesticados


Los muertos no escriben poemas – deberían haberle dicho al lunes.
Y el ahorcado al señor de la corbata, debió contarle un secreto
Y la tumba egipcia al que se pasea en shopping
Nada sabe la desnuda muchacha acerca de arquitectura,
Aunque los psicólogos deberían conocer algo de decoración de interiores.
Los recitadores de moralejas casi siempre mueren cincuenta años antes de su muerte
Y los que se ríen de los que son graciosos, tienen una vida tan triste como el hombre que inventó el semáforo.
Todos queremos tener un perro que domesticar.
No nos alcanza con el polizón que a veces nos empuja al auténtico aventurero que somos más allá de cualquier domingo

Pedro Patzer

1 comentario:

pedro patzer dijo...

NADA SATISFACE AL RESENTIDO

Jesús ama tiernamente a Judas. Lo elige como uno de sus discípulos. Judas tuerce la boca,
piensa: "Por algo me eligió. Algún interés esconde". Jesús lo nombra tesorero de los
apóstoles. Judas masculla: "Me nombra tesorero para tenerme todo el día ocupado mientras
él se luce haciendo milagros". Jesús le permite que haga dos o tres milagros. Judas le
contesta que él no tiene por qué imitar a nadie. Judas anda con el ceño fruncido y la cara
desencajada en una mueca de mal humor. Nada le cae bien. Todo es un pretexto para
desencadenar interminables discusiones. La popularidad de Jesús lo irrita. Finge temer por
su suerte y le aconseja desistir de su campaña de agitación social, pero lo que busca es
sabotearlo. En vista de que Jesús sigue haciendo proselitismo lo denuncia a la autoridad con
la excusa de que así lo salva de males mayores. Cuando Jesús resucita, Judas no aguanta
más y se suicida.

Marco Denevi

Los adioses

Por Pedro Patzer Escribo adioses, así en plural, como quien dice gaviotas, como si todos las despedidas fueran iguales, como si nos pudiéram...