Cuidado si desarrolla su sensibilidad, porque comenzará a ver el arco iris en lugares y cosas, donde la dormida mayoría sólo ve un zapato, un monumento o un día hábil (los empleados municipales sólo se enamoran los días hábiles, aunque suelen morir en días no laborables) Y comenzará a no entender la lógica del reloj (la medida de su tiempo será el amor) y a intuir más la nostalgia de los buzones, o el trabajo artesanal del musgo sobre las estatuas. Cuidado si desarrolla su sensibilidad porque comenzará a hallar telarañas sobre los músculos de los héroes, crímenes en algunos silencios y en ciertos aplausos, heridas mortales en hechos que para la muchedumbre, sólo son acciones normales de lo cotidiano. Tenga cuidado si desarrolla su sensibilidad, porque tal vez llore por el naufragio de Noe, y por la soledad del desierto (que se ha quedado sin tentaciones de Cristo); cuídese si desarrolla su sensibilidad porque quizás comprenda al volcán y su necesidad de hacer llegar las piedras secretas del mundo, a alguna parte del cielo, y esto hará que los restos de su infancia, reclamen sus juguetes perdidos y su futuro de fantasma, exija sus otras dimensiones. Desarrollar la sensibilidad significa hacerse parte de la fauna del Misterio, cómplice de todo lo que la campana sacude con su movimiento dominical y provinciano, amigo de todo aquel que busca en un libro, pájaros y en un acordeón, ríos. Cuidado si va a desarrollar su sensibilidad, porque los árboles desatarán ruiseñores imaginarios, y darán frutos que saciaran el otro hambre, quizás el hambre de Adán, hambre que destierra del Edén, o tal vez hambre que destierra de la pobre realidad. Porque si desarrolla su sensibilidad comenzará hallar cementerios de luciérnagas y nidos donde la aurora empolla sus huevos, nidos donde todo lo que amanece engendra hijos, nidos donde el porvenir compone cantos de cuna. Cuidado si desarrolla su sensibilidad, porque se dará cuenta que todos llevamos la Belleza del mundo dentro, y cuando entienda eso, comenzará a querer volar como Leonardo, e intentará encender el verbo minero como César Vallejo, y a aprender el lenguaje de las mariposas, como cualquier viejo maestro de escuela rural. Comprender que podemos ser la Belleza del mundo, parece difícil, sin embargo, el hombre de manos rústicas que desata en la guitarra una milonga parecida a todo lo que dejaron de decir sus muertos, lo demuestra, como lo hace, también, la tejedora belenista al alcanzar en su tejido, un nuevo color de la ancestral espera. Cuidado si desarrolla su sensibilidad, porque los herederos de la vulgaridad del mundo, le cambiarán el nombre, le declararán la guerra, lo despreciarán, sin embargo usted no deberá olvidar, que el mar siempre estará de su lado, que el rocío siempre será su hermano, y que usted, como bien dijo Pablo Neruda, ha nacido para nacer. Si va a desarrollar su sensibilidad, tenga en cuenta que la Libertad vendrá por usted, aparecerá para pedirle sus ropas y sus espadas, sus diamantes y sus limosnas, sus prejuicios y sus deseos, y lo llevará andar por el milagro que hacen los hombres: ese que demuestra que el Paraíso (para los que realmente están vivos) es acá. |
PEDRO PATZER, FEBRERO DE 2012 |
SOY PEDRO PATZER. ARGENTINO, LATINOAMERICANO! MI ABUELO VINO EN UN BARCO PERO YO VENGO DE MÁS LEJOS,MI DESTINO ES LA PACHAMAMA
2/03/2012
CUIDADO SI DESARROLLA SU SENSIBILIDAD!
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