Volver al poema, a ese silencio que es una pregunta del espíritu.
Desandar los viejos caminos del mundo y estrenar un nuevo corazón,
comprender que el prójimo puede enseñarnos a escalar la montaña
aunque él jamás lo haya intentado, aunque él desconozca la montaña
Los sabios nos revelan cuáles son los espejos del corazón
sin siquiera mencionar al corazón,
apenas nos señalan lo amarillo en un libro,
el otoño en la calesita, el pájaro que canta en la casa abandonada,
el molino que no olvida el exilio del viento,
la aurora que nace en el desierto.
¿en qué momento la voz del filósofo
cubrió el rumor del río?
¿en qué momento el rugir del mundo
nos alejó del canto de la vida?
pedro patzer
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